Codificación de la información

  • Con la excepción tan solo de algunos virus, el material genético está constituido por DNA.
  • El DNA generalmente consiste de dos cadenas complementarias arrolladas una en torno a otra para formar una hélice dextrógira. Cada cadena es un polinucleótido lineal de dos purinas R (A y G) y dos pirimidinas Y (T y C).
  • Mientras que los nucleótidos de una misma cadena se unen por enlaces fosfodiester (covalentes), los que se situan en cadenas complementarias se unen por enlaces más débiles (puentes de hidrógeno). Estos se establecen entre bases complementarias: AT (W, weak) y CG (S, strong).
  • El enlace fosfodiester entre los nucleótidos de una misma cadena se establece entre el fosfato terminal en 5′ y el OH terminal en 3′. En consecuencia, cada hebra de DNA está orientada, es decir, tiene una polaridad. La doble hélice se forma por el apareamiento de cadenas antiparalelas.
  • La orientación del polinucleótido hace que la secuencia 5′-G-C-A-A-T-3′ no sea la misma que 3′-G-C-A-A-T-5′.
  • Por convención, las secuencias de DNA se escriben en el sentido en que se transcriben, es decir desde el extremo 5′ (a la izquierda, aguas arriba) hasta el 3′ (a la derecha, aguas abajo).
  • Por convención también, la hebra que se suele almacenar en las bases de datos es la que NO se transcribe (en el caso de que se conozca), por la sencilla razón de que tiene la misma secuencia que el RNA mensajero (T –>U).
  • La longitud se expresa en bp (pares de bases en el DNA y en el RNA de doble cadena, y bases en el RNA de cadena sencilla), Kb y Mb.